La vida urbana gira en torno al automóvil que genera el 25% del dióxido de carbono que se emite a la atmósfera. Además, a algunas personas manejar un coche por largos periodos de tiempo les produce aumentos en la presión arterial, disminución de la tolerancia, frustración, mal humor y agresividad. En cambio, la bicicleta es una alternativa económica que te hará moverte e incluso muchas veces llegarás más rápido a tu destino. Considera al artefacto de dos ruedas como una opción de transporte ¡te encantará!
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